No se debe esperar que sea un videojuego difícil, pues mantiene la propuesta de Mario respecto a ser accesible para toda la grupo y divertido desde lo visual hasta la jugabilidad. Pero eso no significa que sea malo.
Los niveles son divertidos y apelan por la rejugabilidad, ya que no se alcahuetería de un entretenimiento amplio en primera instancia, pero sí es un título que apela a conseguir todos los coleccionables para extender la duración.
Una lectura de Dumbo al estilo Nintendo
Cuando Shigeru Miyamoto creó a Link, una de sus pretensiones en el diseño del personaje era establecer una similitud con el Peter Pan de Disney y es por ello que se viste de verde y con un característico birrete, pero luego el personaje tomó su propia personalidad hasta convertirse en un ícono de los videojuegos.
En Super Mario Bros. Wonder sucede poco similar, pues si admisiblemente el power-up de elefante y la Piropo Maravilla hacen recapacitar a la panorama de Dumbo con elefantes rosas bailando, pero con toda la conducta y adaptado a las dinámicas de entretenimiento de Nintendo. En ocasiones puedes terminar los niveles con esta dinámica y visualmente es muy precioso.
Otro medio ambiente que representa una crecimiento para los juegos de Mario en dos dimensiones son las fichas que potencian cierta característica de los personajes, como el hecho de tener una gorrita para poder planear, que a nivel estético y de gameplay da congruo frescura.
A nivel visual no se puede desmentir el cariño que pusieron los desarrolladores en este título, porque cada medio ambiente en el ambiente es tan importante como la escenografía de un teatro. Incluso hay cosas en el fondo de algunos niveles que creerías que solamente es una cuestión de adorno, pero mientras avanzas te das cuenta que forma parte del entretenimiento y se convierte en una grata sorpresa.
Por otra parte, el modo multijugador tiene aspectos destacados, como el hecho de la colaboración y frenetismo para completar los niveles, pero es un punto en el que faltó más atención, ya que no se alcahuetería de una experiencia verdaderamente competitiva o cooperativa, es sostener, el entretenimiento se concentra sólo en el progreso del tahúr con el primer mando y olvida a los demás. En caso de que se retrasen, el entretenimiento prácticamente los olvida.
Otro medio ambiente en su contra es que se olvida de la individualidad de los personajes. En juegos anteriores de la franquicia, Mario era un personaje neutro, Luigi saltaba más parada, mientras que Peach ocupaba su vestido para cubrir más distancia o Toad era más rápido. En esta ocasión, eso queda completamente olvidado y todos los personajes son prácticamente los mismos.
Respecto al plano, si admisiblemente los niveles son muy variados entre sí y están muy admisiblemente construidos, Nintendo se olvidó de las épocas de Nintendo DS en las que agregaba minijuegos y aunque no se alcahuetería de poco indispensable, sí es poco que se extraña y esperamos se retome en algún momento.
Sin retención, en donde sí pusieron congruo atención fue en el doblaje. Charles Martinet ya no es la voz de Mario, pero para el sabido en Latinoamérica se encantará escuchar que el entretenimiento está doblado al castellano de la región y las flores nos hablarán en un acento con el que nos sentimos identificados.
¿Recomiendo comprar Super Mario Bros. Wonder?
Octubre está saciado de lanzamientos especiales para el mundo del gaming y definitivamente si tienes un Nintendo Switch, este videojuego será un entretenimiento que te vas a querer comprar a partir de este viernes 20 de octubre para ampliar tu catálogo con sana diversión.
Creditos a Fernando Guarneros Olmos
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