Tiempos de macht en la selva, en pocos días más arrancará la etapa del aprecio. El panda, el amigo bicolor, cautivador, predilecto de postales e íconos de las redes, afamado por depredar los campos de bambú asiáticos empieza a tener otros intereses. El aprecio está en dietario y la temporada de apareamiento se avecina. A preparar la producción se ha dicho ! ya que el llegada de la primavera, que se dará entre fines de febrero y hasta mayo, hará que machos y hembras comiencen a tener costumbres poco habituales. Pero sólo durarán por no más de 2 a 4 días.
Los pandas, alcanzan la seso sexual entre los 5 abriles y medio y 6 abriles. Una hembra puede aparearse con varios machos, que compiten entre ellos. El “poliamor” es un trato que no genera grescas. Las hembras suelen tener crías en primavera y en verano, normalmente entre una y cuatro. El periodo de florecimiento oscila entre los 97 y 163 días y normalmente dan a luz a una sola cría (el caso de los mancuernas se suele dar en cautividad, cuando se utiliza inseminación asistida). Los pandas jóvenes se quedan en su caverna hasta los 90 días, mientras sus madres cuidan de ellos. Los machos escasamente se interesan por su descendencia. Son animales tímidos y solitarios indemne en esta época de apareamiento. Los machos buscan a las hembras y se producen las cópulas. Recio y hembra están juntos durante unos pocos días y copulan varías veces al día. Luego cada cual sigue su camino, se separan; el hombruno escudriñamiento nuevas hembras y la hembra puede copular con otros machos que aparezcan. Por lo tanto, los osos son congruo promiscuos aunque a afirmar verdad de las postales parezcan amorosos y fieles.
Muchos lo usan para representar poco “cautivador, un talismán que atrae la suerte, pero el detrás de imagen de Whatsapp: la imagen de una cara de oso coloreada en blanco y cabreado es el emoji que representa a un panda para expresar dulzura, pero aunque su pelaje se vea suave, excelente y dignos de estrujar nadie querría toparse con uno de ellos por estos días en que preparan el celo.
De hábitos nocturnos, buscan comida por la perplejidad entre la tierra y los árboles con ligereza y agilidad, usan sus patas delanteras para ponerse la comida en la boca. Los depredadores del panda ( rojo, otra variedad) son las panteras de las nieves (Panthera uncia).
La especie todavía hoy se enfrenta a la destrucción de su hábitat inducida por los seres humanos por eso hay que celebrar y honrar sus días de reproducción.
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Creditos a Gabriela Patrone
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