El cohete más ancho del mundo, el Starship de la compañía SpaceX, voló por los aires en su segundo revoloteo de prueba, este sábado sobre los cielos de Texas.
Aunque la delegación no logró su objetivo de dar una dorso a la Tierra ayer de caer en el Pacífico, sus ocho minutos de duración dejaron varias conocimiento -y algunas buenas noticiero al equipo liderado por Elon Musk.
Un investigación del sitio de tecnología Gizmodo precisa, por ejemplo, que al cohete le llevó mucho menos tiempo extraer de la torre que en su primer revoloteo el 20 de abril, con un extensión más controlado, Adicionalmente, a diferencia de aquella vez, cuando fallaron seis de los 33 motores Raptor, esta vez se encendieron todos.
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por Pablo Corso
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