Hoy, a partir de las 16:00 y hasta las 17.20, los amantes de los fenómenos astronómicos tienen una cita imperdible: en ese horario —en la extensión de la ciudad de Buenos Aires- se verá un hermoso desvanecimiento parcial de Sol. Si perfectamente para la posición geográfica de los observadores que estén en el AMBA la Vitral escasamente llegará a cubrir el 13% del diámetro, poco así como un pequeño “mordisco”, el espectáculo no deja de ser sorprendente.
Por otra parte, cuanto más al finalidad del país se esté enclavado, mejor será la visión. Por ejemplo, desde Jujuy el disco solar estará oculto en un 30% del total.
Los eclipses, pese a ser un evento exorbitante global –mucho más, por ejemplo, que la pasada de un cometa– tienen asociada una inmensidad tangible y generan emociones singulares entre sus observadores.
Tal como le contó a PERFIL la doctora Estefanía Coluccio, docente universitaria y flagrante responsable del Planetario de Buenos Aires: «cualquier engendro del bóveda celeste es una buena ocasión para iniciarse en la observación. De hecho, la pasión por la astronomía de todos los grandes científicos comenzó al acontecer observado un evento exorbitante como un desvanecimiento, un cometa o una supernova. Son efectivamente eventos inspiradores que te pueden marcar de por vida».
Qué es un desvanecimiento anular de Sol
Esta doctora en física, especializada en divulgación científica, rememora que «yo estaba viviendo en Washington DC durante el desvanecimiento de Sol del año 2017. Y viajé más de 12 horas en coche para poder “verlo” en la zona de la totalidad (oscuridad) y no sólo ver la superposición de la Vitral delante del Sol, sino el cambio de la luz, de los sonidos de los animales, el trascendental y áspero descenso de la temperatura. Fue una experiencia sorprendente«, recuerda. Y concluye: durante un desvanecimiento yo vuelvo a fascinarme por el hecho de que todos los astros se mueven constantemente, a pensar en cómo lo hacen, entender por qué ocurre. En fin, es un momento de contemplación de la naturaleza así que es hermoso ya sólo por eso.
Como verlo desde el Planetario
En el Planetario de la ciudad de Buenos Aires este desvanecimiento no pasará inadvertido. Según le dijo a PERFIL Diego Hernández, miembro del equipo de divulgación astronómica de la institución, «en el Planetario vamos a observarlo y compartirlo con el sabido que se acerque. Para eso vamos a hacer las observaciones desde la la explanada exógeno». El equipo de comunicación de la ciencia contó que, «pondremos a disposición de quienes se acerquen nuestros telescopios. Y vamos a contarle y explicarle a la gentío todo lo que vayamos viendo y todo lo que los visitantes quieran enterarse». El horario de observación del engendro exorbitante será a partir de las 16.00 y durará hasta, al menos, las 17.20 hs, «que es aproximadamente el rango de tiempo que cubre el desvanecimiento», detalló Hernández.
Para quienes quieran disfrutar de este «selección» entre el personaje rey y la Vitral, desde su ocasión, debe tener en cuenta varias precauciones típicas para cuidar la salubridad de sus fanales. Según advierten los expertos, «aunque se proxenetismo de un desvanecimiento anular y parcial hay que tomar recaudos para mirarlo con seguridad.
«Vamos a contarle y explicarle a la gentío todo lo que vayamos viendo»
¿Qué hacer y qué no? Lo mismo que se hace ayer de pensar en observar el sol: nunca mirarlo en forma directa (haya o no desvanecimiento), sólo usar anteojos especiales para eclipses (no anteojos de sol comunes, ni radiografías, ni otros inventos caseros). Si se utilizan telescopios amateurs estos deben estar equipados con filtros seguros y con métodos de proyección. Siempre apuntar el telescopio por su sombra y proyectando la luz cerca de el costado, enfocando sobre un cartón blanco. Y disfrutar el espectáculo celeste con seguridad.
Creditos a Enrique Garabetyan
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