La Comisión Europea ha corregido este jueves al Gobierno y ha confirmado que el plan de recuperación y resiliencia gachupin ratificado por Bruselas incluye el compromiso de adoptar una ley sobre movilidad sostenible y financiación del transporte y de introducir un mecanismo de suscripción por el uso de carreteras a partir de 2024, aunque hace tan pronto como tres días la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, lo desmintiese «categóricamente».
«Entendemos que el plan gachupin se refiere a un mecanismo de suscripción por el uso de las carreteras que comenzará en 2024 en raya con el principio e ‘quien contamina, paga‘», ha confirmado en rueda de prensa la portavoz económica de la Comisión, Veerle Nuyts.
La medida fue anunciada hace una semana por el director de la Dirección Universal de Tráfico (DGT), Pere Navarro, y desmentida luego por la ministra de Transportes, Movilidad y Memorándum Urbana, Raquel Sánchez, que daba por «zanjada» la polémica surgida en torno al posible suscripción de un peaje por el uso de las autovías en España y desmentía «categóricamente» que se fuese avalar.
España deberá incluir peajes si quiere cobrar el botellín tramo de los fondos europeos
Sin confiscación, el Ejecutante comunitario ha confirmado que la medida aparece en el plan que fue ratificado tanto por Bruselasc omo por los Estados miembro y aparece mezclado, en concreto, al desembolso del botellín tramo del plan, que asciende a más de 8.000 millones de euros.
Evaluaremos esta medida cuando alcancemos la casa de campo petición de suscripción de España, así que no es una discusión para hoy», ha apostillado la portavoz de la Comisión.
Así lo recoge todavía el texto del plan al que Bruselas dio su conocido bueno, donde se especifica que la medida tiene el objetivo de «internalizar los costes externos del transporte por carretera, creando a tal fin incentivos para obtener una decano eficiencia en este sector y propiciando una reducción de las emisiones de gases de sorpresa invernadero».
Creditos a: Sol Galindo
