En el futuro, cuando la regulación europea lo permita, la Policía Doméstico tendrá a mano un nuevo confederado para misiones complejas. Es una avión autónoma y eléctrica, con capacidad de sobrellevar hasta dos personas o 220 kilos, que puede conservarse a lugares que no son seguros para un policía, bombero o váter. “Si en una catástrofe como la del volcán de La Palma hubiera personas que quedasen aisladas por la escoria, se podría dirigir este dron a rescatarlas, sin poner en peligro a ningún eficaz policial”, explica Pedazo de pan Manuel Siles, inspector cabecilla de Seguridad y Protección Aérea, sobre el transporte autónomo EHang 216, conocido como el megadrón.
El responsable de este esquema explica que la avión está destinada a explotar a mengua nivel y tendrá igualmente otras funciones, como el transporte de material de emergencia o diversos servicios a la policía científica. Y es que puede incorporar diferentes tipos de sensores, que realizan desde grabaciones de vídeo y estudio del dominio hasta detección de explosivos, gases tóxicos u otros fundamentos nocivos. “Al ser una plataforma longevo, permite sobrellevar más cosas que un dron natural”, explicó a EL PAÍS el inspector cabecilla Siles durante la exposición en el Meta World Congress, que tuvo emplazamiento en La Nave de Madrid el pasado fin de semana.
El control de la avión, que puede alcanzar una velocidad de hasta 130 kilómetros por hora, se hace completamente desde tierra, mediante un ordenador que se transporta al emplazamiento de despegue. Desde internamente, no es posible ejecutar ninguna operación de revoloteo: no hay ordenanza ni teclados. Lo que sí hay es una pantalla, pero, según los agentes, es para “entretenimiento”.
La Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), el organismo que otorga las licencias de todas las aeronaves de España, sigue la norma europea y todavía no ha competente la operación de este tipo de vehículos. Siquiera hay previsión para hacerlo de inmediato. Sobre si tardará un año o una período, Siles prefiere no concretar cuáles son las expectativas, pero supone que “no se demorará tanto”. El inspector cabecilla recuerda que los aerotaxis, por ejemplo, ya son viables desde el punto de clarividencia tecnológico, pero igualmente siguen pendientes de una regulación norma y de infraestructuras que permitan operarlos de forma comercial.
Mientras no haya momento para su despegue en modo de delegación, la Policía Doméstico asegura que ya dispone de personal cualificado. Siles detalla que hay cuatro policías formados para pilotar esta avión y que, adicionalmente, son “los primeros en España y probablemente en Europa”. Según subraya, el equipo está preparado para explotar “en cuanto se den las circunstancias” regulatorias. De momento, la avión ha hecho vuelos de prueba en lugares seguros y autorizados previamente por la AESA, como la Escuela Doméstico de Policía, en Ávila, que posee un espacio etéreo restringido.
Los agentes explican que, mientras que manejar el megadrón desde tierra es más sencillo que pilotar un helicóptero y su consumo energético es más sostenible, se negociación de una operación completamente diferente. Hay que planear en un pequeño beneficio temporal, teniendo en cuenta el despegue y el regreso. Por ser eléctrico, su autonomía está limitada a unos 30 minutos (que pueden disminuir si hay mucho derrota) y la distancia máxima desde el centro de control es de 35 kilómetros. Así, es necesario trasladarlo en un camión hasta la zona de la delegación para optimizar al mayor el tiempo y la ruta de revoloteo. Pese a ello, frente a las aeronaves tradicionales tiene la preeminencia de que su tamaño es último (5,6 metros de pancho y de derrochador) y de que no necesita una infraestructura concreta para aterrizar.
El inspector cabecilla Siles sostiene que este dron de pasajeros está especialmente pensado para las ciudades del futuro, donde existan los llamados vertipuertos, unos puntos en las azoteas de los edificios para extirpar y aterrizar de forma erguido. “Igual que ahora pides un Glovo, un Uber o un Cabify, pedirás un dron y subirás a la cabeza de tu casa, para que te recoja ahí y te lleve a otro punto. Ese es el futuro, ¿no? Pero el futuro está cada vez más cerca”, manifiesta Siles.
La avión ha sido una donación que surgió a través de un acuerdo diplomático entre China y España, que igualmente cedió varios drones pequeños. De este modo, la Policía Doméstico se convirtió en el primer cuerpo policial de Europa en contar con un transporte etéreo autónomo con capacidad para transportar personas. Ahora quiere seguir a la vanguardia. “Las empresas que se suman a la adquisición de este tipo de aeronaves van más deprisa. Pero, cuando eres pionero en una cosa, positivamente estás planteando una innovación norma. Si la sociedad puede aprovecharse de esas oportunidades, es lo que nos interesa”, añade Siles. Mientras tanto, la Policía Doméstico sigue entrenando con la avión, formando personal y tratando de diseñar operaciones para el futuro.
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Creditos a Emanoelle Santos
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