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El astillero digital e hiperconectado que es maniquí de futuro | Digitalización | Tecnología


La arribada del 5G se anticipa como uno de esos grandes pasos en la historia de la tecnología que va a cambiar no solo la modo en la que nos comunicamos, sino que todavía va a difundir enormes avances en todo tipo de industrias. El paso a un entorno en el que se trascendencia una velocidad de descarga de 10 gigas de información por segundo abre la puerta a un nuevo proscenio en el que el big data, el Internet de las Cosas o la inteligencia industrial tendrán nuevas y más eficaces aplicaciones en sectores que van más allá de las telecomunicaciones. No en vano, el mensaje The Mundial Economic Impact of 5G, pulido por la consultora PwC en 2021, número en 1,3 billones de dólares (aproximadamente 1,08 billones de euros) el huella que producirá esta tecnología en el PIB mundial en el año 2030. Un impacto que ya se está dejando notar, incluso en ámbitos tan sorprendentes como el de la industria naval.

El ejemplo de cómo el 5G puede revolucionar este sector se encuentra en Ferrol. Allí, Telefónica ha establecido una colaboración con Navantia, la sociedad pública española dedicada a la construcción naval, y las empresas Ericsson, Cinfo e Idronia para crear el primer astillero 4.0 de Europa. Mediante la implantación de dos redes 5G completas en su circuito, conectadas con un centro de Edge Computing en una central de Telefónica cercana, este puesto es pionero en el uso de esta tecnología. “El astillero de Navantia en Ferrol posee la red privada 5G para uso industrial de veterano capacidad desplegada hasta la aniversario”, explica Ana María Vega Envejecido, experta en innovación y proyectos 5G de Telefónica España. “Es la primera vez que hemos conseguido alcanzar, en un proscenio verdadero, 4 gigabits por segundo de satisfecho de cuesta”.

Posibilidades insospechadas

Esta capacidad de transferencia de datos permite hacer uso de otras aplicaciones tecnológicas hasta la aniversario insospechadas en la industria naval. Una de ellas es la Existencia Aumentada, que en este astillero se utiliza para proveer las labores de reparación mediante la donación técnica remota. “Este sistema perfeccionamiento la comunicación entre un oficial de mantenimiento de Navantia, situado en el puesto de la avería, y el servicio técnico en remoto”, detalla Juan Porto, responsable de Encargo Industrial de Navantia Ría de Ferrol. “El oficial locorregional comparte el vídeo captado por sus quevedos de Existencia Aumentada al soporte remoto, que da indicaciones en tiempo verdadero y con fundamentos gráficos marcados sobre la imagen que el oficial está observando a través de las quevedos, usando flechas, círculos o cualquier dibujo que ayude al oficial de mantenimiento. En este caso, la red 5G nos permite tener comunicaciones de muy devaluación latencia entre las quevedos de Existencia Aumentada y el ordenador del servicio técnico en remoto”.

El astillero de Navantia en Ferrol posee la red privada 5G para uso industrial de veterano capacidad desplegada hasta la aniversario

Las redes 5G de este astillero no solo permiten optimizar los procesos de reparación, sino todavía los de fabricación de grandes buques. “Estas embarcaciones se construyen troceándolas en unidades manejables por peso y dimensiones”, relata Porto. Como en un puzzle, pero con piezas de varias toneladas, encajar unas con otras de modo exacta es secreto. “La detección de posibles desviaciones en la grado de fabricación de los bloques es fundamental. El escaneado 3D permite difundir un maniquí tridimensional verdadero de cada pedrusco a partir de una nimbo de millones de puntos, y que puede compararse con el maniquí teórico del buque para detectar posibles errores. Del mismo modo, se puede realizar un montaje aparente de bloques reales, previo al montaje verdadero de los mismos”.

Esta simulación mediante imágenes 3D hace, luego, que la construcción de un gran navío sea más sencilla y redimido de costosos errores de fabricación. Pero, para ello, es necesario procesar una cantidad de datos en tiempo verdadero que no sería posible sin el 5G. Las dos redes de este astillero conectan con un centro de Edge Computing a pocos kilómetros del mismo. “Es un centro de cuenta dotado de altas capacidades de procesado de datos y procesado dibujo”, apunta Ana María Vega Envejecido. “Esto nos permite disponer de todas las ventajas de una computación elástica con la misma velocidad que si estuviera interiormente del propio astillero. Por ejemplo, en el uso del escaneo 3D, poder procesar toda esa información subida en tiempo verdadero permite que los expertos puedan validar la construcción y detectar posibles desviaciones en mucho menos tiempo”.

Se evoluciona en torno a un maniquí dinámico de taller, factoraje, almacén, etc. en el que no existe ninguna infraestructura atornillada a las paredes o al suelo

Ana María Vega Envejecido, experta en innovación y proyectos 5G de Telefónica España

Esta digitalización de procesos lleva al astillero de Ferrol, en palabras de Vega Envejecido, “en torno a la cuarta revolución industrial”. “Hablamos de entornos flexibles que sean capaces de adaptarse de forma dinámica a las evacuación cambiantes del negocio. Se evoluciona en torno a un maniquí dinámico de taller, factoraje, almacén, etc. en el que no existe ninguna infraestructura atornillada a las paredes o al suelo”. El de Navantia es un ejemplo, pero Telefónica ya ha participado en otros proyectos: “Hemos hecho despliegues muy interesantes para probar otro tipo de aplicaciones ligadas a la transporte en Gestamp, El Corte Inglés o la terminal portuaria de APM”. Un entorno nuevo, hiperconectado y mucho competente para la industria del futuro.

En ruta en torno a la Industria 4.0

El astillero de Navantia en Ferrol, enmarcado interiormente del plan de transformación digital de la compañía, es un paso más en torno a la Industria 4.0, un maniquí en el que la optimización de procesos mediante la tecnología abre la puerta a una nueva dimensión. “La taller digital es el maniquí en torno a el que todas las grandes empresas están evolucionando”, señala Ana María Vega Viego. “Se calma que los vehículos autónomos de la taller se coordinen y se telecontrolen, que las máquinas interactúen en tiempo verdadero, que estén sensorizadas y que se conecten en la nimbo para la toma rápida de decisiones”. Todo ello depende de la capacidad para la transmisión y el procesamiento de datos que solo es posible a través del 5G. “El molde de la Industria 4.0 se cimiento en disponer de redes inalámbricas fiables, seguras y de gran capacidad”, subraya la experta en innovación y proyectos 5G de Telefónica.

Creditos a Guillermo Arenas

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