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Descubrieron en un asteroide rudimentos orgánicos esenciales para el inicio de la vida en la Tierra

Los científicos localizaron uracilo y niacina en las muestras del asteroide Ryugu lo que refuerza la teoría que algunos ingredientes vitales para la vida en la tierra provienen del espacio. Los investigadores trajeron la roca espacial a la Tierra en 2020.

Estos dos compuestos orgánicos esenciales refuerzan la idea de que algunos ingredientes esenciales para la vida en la Tierra llegaron a borde de rocas espaciales hace millones de primaveras, según un estudio divulgado este martes 21 de marzo por la revista Nature.

El uracilo es uno de los componentes químicos del ARN, una molécula que contiene las instrucciones para la construcción y el funcionamiento de los organismos vivos. Por su parte, la niacina, igualmente emplazamiento vitamina B3 o ácido nicotínico, es animoso para su asimilación, según informó DW.

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Los hallazgos apoyan teoría sobre vida en la Tierra

Los nuevos descubrimientos coinciden con la hipótesis de que los cometas, asteroides y meteoritos bombardearon la Tierra en sus inicios, hace unos 4.500 millones de primaveras, y sembraron el planeta con compuestos que allanaron el camino para los primeros microbios.

Los científicos ya habían detectado moléculas orgánicas en meteoritos caídos en la Tierra, pero no estaba claro si estas rocas espaciales se habían contaminado por su exposición al medio terreno tras el aterrizaje.

«Nuestro principal hallazgo es que el uracilo y la niacina, los dos de importancia biológica, están efectivamente presentes en entornos extraterrestres y pueden poseer llegado a la Tierra primitiva como componentes de asteroides y meteoritos», afirmó Yasuhiro Oba, autor principal y astroquímico de la Universidad de Hokkaido (Japón).

«Sospechamos que desempeñaron un papel en la crecimiento prebiótica de la Tierra y, posiblemente, en la aparición de la primera vida», añadió.

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Las muestras llegaron en 2020 a la Tierra

Los fragmentos de Ruygu, parecidos a escombros de color plomizo umbrátil, fueron obtenidos en 2019 por la nave Hayabusa2 de la Agencia Espacial Japonesa. Estas muestras recorrieron unos 250 millones de kilómetros para aparecer a la Tierra.

De la mano de una cápsula meticulosamente sellada, los pedazos del asteroide aterrizaron en el interior remoto de Australia en 2020, para luego ser llevados y analizados en Japón.

«Las moléculas de Ryugu se recuperaron en un entorno extraterrestre prístino. Se tomaron muestras directamente en el asteroide Ryugu, se devolvieron a la Tierra y, finalmente, a los laboratorios sin ningún contacto con contaminantes terrestres», explicó Oba.

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La importancia del uracilo y de la niacina

El ARN, sigla de ácido ribonucleico, no sería posible sin el uracilo. El ARN, una molécula presente en todas las células vivas, es animoso en la codificación, regulación y actividad de los genes. Asimismo, tiene similitudes estructurales con el ADN, molécula que transporta la huella genética de un organismo.

En tanto, la niacina es importante para el asimilación y puede ayudar a producir la «energía» que impulsa a los organismos vivos.

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Nuevo estudio de otra roca espacial

Los asteroides son cuerpos rocosos primordiales que se formaron en los inicios del sistema solar. Ryugu, que tiene en torno a de 900 metros de diámetro y está clasificado como un asteroide cercano a la Tierra, podría poseer formado sus compuestos orgánicos con la ayuda de reacciones químicas provocadas por la luz astral en materiales helados.

El astroquímico orgánico y coautor del estudio, Yoshinori Takano, declaró que ahora demora con impaciencia los resultados de los prospección de las muestras del asteroide Bennu, que llegarán a la Tierra en septiembre de la mano de OSIRIS-REx, labor operada por la NASA.

NT / ED

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Creditos a Nicolás Turdera

Fuente

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