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La inflación vuelve a subir en abril hasta el 4,1%, el veterano incremento desde mayo del…

La inflación volvió a crecer en abril, luego de encadenar varios meses de caídas. Así lo constataron los datos provisionales publicados por el Instituto Doméstico de Estadística (INE), que muestran un incremento de los precios del 4,1% interanual en el cuarto mes de 2023. Se manejo de la veterano subida desde mayo de 2022, hace un año.

Se manejo de una aviso que afecta a miles de autónomos. Pese a aumentar los precios en sus negocios, los márgenes de beneficio se están viendo reducidos, especialmente en sectores como el agrícola o el comercio. En este sentido, un flamante referencia de CEPYME puso de manifiesto que los gastos de los autónomos se han disparado un 33% en sólo 24 meses.

Por su parte, los datos del Índice de Precios de Consumo (IPC) aportado por el INE muestran un diligente descenso en la inflación subyacente -excluyendo alimentos no elaborados y la energía-. En abril se situó en el 6,6%, dos puntos y medio por encima del IPC genérico.

Tal y como expresó la ministra de Finanzas, Nadia Calviño, el Gobierno atribuye el subida interanual de los precios registrado en abril al “objetivo saco” que en el mismo mes del año pasado tuvieron algunas medidas para contener la inflación, como la mejora al precio de los carburantes.

Los agricultores culpan a las distribuidoras del subida en el precio de los alimentos

A pesar de que los datos muestran cómo la inflación en los últimos meses parece estar reduciéndose, el incremento en los precios de los alimentos es una de las cuestiones más preocupantes, tanto para los consumidores como para miles de autónomos y pequeños negocios dedicados al sector agrícola o al comercio.

En este sentido, aunque la inflación subyacente excluye a los alimentos no elaborados, lo cierto es que el incremento de los precios ha afectado especialmente a estos productos en los últimos meses. En febrero, los productos de nutriente crecieron un 16,6% de media en términos interanuales.

En la cesta de la operación, flama especialmente la atención el subida desmesurada en algunos acervo que se producen en el campo gachupin, como la cuajada entera, que cuesta un 33,2% más que en febrero del año pasado; las legumbres y hortalizas frescas, que son un 23,6% más caras; el óleo de oliva, (33,5%); o los huevos, que ya valen un 28% más que hace un año.

Sin incautación, los autónomos agricultores y ganaderos insisten en que no están viendo repercutido estos datos en sus cuentas. En su opinión, el aumento de los márgenes se está produciendo en el resto de eslabones de la sujeción alimentaria, como la gran distribución. “En el mejor de los casos, estamos cubriendo los costes de producción en estos momentos”, afirmó a este diario hace unas semanas Lorenzo Ramos, secretario genérico de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA). 

En este contexto, los autónomos del sector primario reclamaron una veterano transparencia por parte de los diferentes eslabones que participan en la sujeción alimentaria, con la intención de conocer qué actores están aprovechándose de la inflación aumentando sus márgenes de beneficio. “La sujeción alimentaria ha sido, tradicionalmente, muy poco transparente, y por eso muchos estaban en contra de la entrada en vigor de la ley», valoró, en este sentido, Lorenzo Ramos. 

“Las distribuidoras están subiendo los márgenes por encima del mercado. Hay sectores, como el de la fresa, donde el producto sale finalizado, las cooperativas pagan hasta el transporte, y el precio de traspaso al manifiesto es el doble de lo que se paga a los agricultores y ganaderos”, concluyó el secretario genérico de UPA. 



Creditos a: Joaquín Aragonés

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