Para escribir un artículo no hace error suceder estudiado periodismo o humanidades hispánica, lo único necesario es retener de qué queremos murmurar, tener ganas de escribir sobre ello y ponernos en la piel del conferenciante.
Vivimos a un ritmo frenético que casi no deja espacio a la imaginación y mucho menos a la escritura. Por eso una de las grandes excusas de los blogueros es la error de tiempo. Sí, sí, la palabra excusa sería en este caso la correcta y explico por qué: según el tipo de artículo que escribamos tendremos que asignar más o menos tiempo, pero si aprovechamos los momentos de inspiración todo saldrá rodado.
El problema a la hora de escribir suele estar en verdad en la sufragio del tema. Podríamos murmurar y desvariar durante horas sobre cientos de temas, pero cuando vamos a ponerte a ello pensamos: “¿y ahora sobre qué escribo?”
Lo primero que tenemos que tener en cuenta es que tener un blog es como dar una conferencia cuándo tú quieras, sobre el tema que te apetezca en ese momento, y sin remate en la duración. Es tu blog y eres plenamente fugado.
Sabiendo esto, debemos percibirlo como una forma de expresión y no como una obligación. Si partimos de lo segundo nuestros artículos serán forzados y, como toda obligación, cada día nos apetecerá menos escribir.
Dicho esto os dejo unos consejos que espero que puedan servir de ayuda:
Antiguamente de iniciar, lo primero será pensar qué orientación queremos darle al blog. Debe ser un tema que en realidad nos guste y del que podamos murmurar durante horas. Es proponer, si nos mola la tortilla de patatas y todas nuestras conversaciones terminan girando en torno a ella, no hablemos sobre otras cosas que nos aburran sólo por querer parecer más profesional. Recordemos: ¡Es nuestro blog!
Una vez sepamos de qué murmurar, podemos designar entre un dominio relacionado o poco más mezclado a tu persona. Como multiplicador a tener en cuenta os diría que Google quiere ahora penalizar a los blogs que utilizan en el dominio keywords. Habrá que ver cómo termina la cosa pero es bueno tenerlo en cuenta.
El sucesivo paso será darle forma con alguna plantilla modificable y con los plugins que nos resulten más interesantes.
Una vez tengamos el blog, en el día a día hay algunos trucos que pueden servirnos de ayuda:
– Borrasca de ideas: Antiguamente de ponernos a escribir un artículo debemos pensar en cuáles son las ideas claves de las que queremos murmurar, y anotarlas en algún sitio. Como consejo os diré que yo apunto ideas y frases que me vienen a la mente sobre el tema. Por otra parte de venirnos a nosotros aceptablemente para no olvidar ningún aspecto importante, nos ayudará a instrumentar el artículo. Podemos beneficiarse para luego esos mismos conceptos resaltarlos en negrita.
– Estructura: Es uno de los aspectos más importantes, ya que hará que el conferenciante no se pierda y nos ayudará a enlazar temas. Para ello la estructura debe ser deducción y coherente. Un truco en estos casos es apuntar en un adyacente sobre qué versa cada párrafo y ver el conjunto.
– Verbo: Seamos nosotros mismos escribiendo, carencia de intentar sorprender al conferenciante con nuestro amplio verbo del siglo XV o nuestra capacidad de adornar los contenidos. Es una gran satisfacción cuando cualquiera te dice que al observar tus artículos te está escuchando a ti. Por eso, siempre debemos inquirir la naturaleza y la cercanía.
– Trucos periodísticos: Intentemos no repetir frases o invertir una misma palabra dos veces en la misma columna, siempre podemos utilizar de sinónimos. Evitemos el verbo acortado de Internet, utilicemos los signos de puntuación donde correspondan, el entrecomillado si transcribimos de forma exacto la frase de otra persona, y no nos olvidemos de citar las fuentes.
– Estudiar en voz ingreso: Este es un truco que nunca error. Al observar en voz ingreso veremos si la repaso es amena, si hemos construido frases muy largas (lo notaremos porque nos faltará el espacio entre dos puntos) o si la estructura es coherente.
Por postrero, si hay cualquiera de total confianza que pueda observar nuestro artículo ayer de publicarlo, mejor que mejor. Aunque nosotros sepamos lo que queremos transmitir en cada momento, no siempre se refleja la idea en el texto. En mi caso aprovecho para dar las gracias a @ortegajaime, que al escueto le tengo mareadito con los artículos. ¡Gracias!
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Creditos a María Tejero
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